La Federación de Trabajadores de la Industria del Salmón de Quellón asegura que "Salmon Chile hace enormes esfuerzos para jugar y manipular con la dignidad de dirigentes y trabajadores que aún se encuentran contratados con las mismas fórmulas de contratos por faena amenazando con más despidos, con no pagar salarios, con no cumplir con los bonos y amenazas de descuentos".
La Federación de Trabajadores de la Industria del Salmón de Quellón, señaló por medio de un comunicado público su "profundo rechazo a la actuación manipuladora e inhumana de la patronal Salmon Chile que ha utilizado a dirigentes de sindicatos de empresas salmoneras que aún cuentan con producción para presionar a todos los poderes del Estado y a las comunidades para que intercedan ante el Gobierno para seguir manteniendo sus prebendas y privilegios, y no hacerse cargo de lo que han generado, tanto al medio ambiente como a los trabajadores".
El comunicado indica que "Salmon Chile hace enormes esfuerzos para jugar y manipular con la dignidad de dirigentes y trabajadores que aún se encuentran contratados con las mismas fórmulas de contratos por faena amenazando con más despidos, con no pagar salarios, con no cumplir con los bonos y amenazas de descuentos, sin hacerse cargo de su responsabilidad ante las crisis que ellos mismos han generado una y otra vez, usando a la producción en Chile como regulador de precios a nivel internacional y sin importarle en absoluto la forma contaminante de esta y la explotación de los trabajadores".
Según los trabajadores su situación es provocada por no contar con una Ley laboral "que realmente dé cuenta de nuestros derechos, pues esta permite que los contratos se establezcan por faena, lo que nos ha convertido en temporeros, que no tenemos derecho a indemnización al no contar con la antigüedad necesaria y más del 50% no tenemos derecho a acceder al Seguro de Cesantía".
"Necesitamos la Reforma Laboral. Y es urgente que comencemos a trabajar por cambiar el modelo productivo de explotación del medio ambiente y de los trabajadores, que tiene como único objetivo el seguir enriqueciendo a unos poco grandes empresarios, que no permiten el verdadero desarrollo de nuestro país y para ello es imprescindible que cambiemos la actual Constitución que solo garantiza derechos a los grandes empresarios y protección exclusiva a la propiedad privada", agregan.
Finalmente, hacen un llamado al Gobierno, parlamentarios y funcionarios públicos "a ponerse en disposición para trabajar responsablemente para abrir caminos de mitigación en esta crisis, pero también para analizar y comprometerse con los cambios profundos que Chile necesita".
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